El
galardón otorgado por el Festival Internacional del Cante de las Minas se
entregará el 12 de agosto.
La
Unión, 14 de junio 2017. El Festival Internacional del Cante de las
Minas, premia al Principado de Asturias, con el máximo galardón institucional, Castillete
de Oro, por la confluencia entre sus cuencas mineras.
El pasado año Asturias y La Unión realizaron un primer
acercamiento, concretamente con Langreo, que se materializó en intercambios
culturales y la actuación, en la pasada edición del festival, de la cantautora
asturiana Marisa Valle Rosso.
Si La Unión es un pueblo minero, la asturiana es la cuenca
minera española por excelencia. En Asturias la actividad carbonífera comenzó a
principios del siglo XIX en el territorio histórico situado en los valles
centrales del Principado, territorio más conocido como La Cuenca.
A principios del siglo XX existían una gran cantidad de
empresas mineras en Asturias, la mayoría de ellas de capital extranjero
procedentes, principalmente, de Francia, Bélgica, Alemania o Inglaterra.
Las Cuencas Mineras del Principado se consolidaron como las
de mayor producción de España debido al incremento de la productividad y a las
políticas proteccionistas sucedidas en las dos Guerras Mundiales. Pero no fue
hasta mitad de siglo cuando la mina se convirtió en el elemento identificativo
de la Comunidad Asturiana, debido a la enorme evolución que experimentó, al
progreso industrial en el que se vio envuelta y a la llegada de miles de
familias que se asentaron en las cuencas.
Gracias al importante crecimiento de la población obrera
surgieron numerosas asociaciones políticas, sindicales y culturales con las que
las cuencas mineras asturianas tomaron un importante papel y un singular
protagonismo en la lucha obrera. Se reconocieron hechos históricos puntuales
como la Revolución del 34 o La Huelgona del 1962.
La principal empresa pública para la explotación del carbón
que ha marcado el devenir de las cuencas, Hunosa (Huellas del Norte S.A.), nace
en el año 1967. Esta empresa logró tener más de 20.000 trabajadores en los años
80 y hoy día presenta una dura y complicada reconversión debido a otros
intereses ligados a las nuevas energías y a la investigación.
Es solo una parte de los esfuerzos políticos, sociales y
empresariales que llevan realizándose desde hace varios años para dotar a las
cuencas mineras de alternativas sólidas a su historia. Algunas de las
soluciones propuestas pasan por el aprovechamiento y comercialización de su
patrimonio industrial, su excelente situación geográfica y sus recursos
naturales.
Actualmente, la impronta minera se ha instalado en el
patrimonio de Asturias de un modo tangible en casi todos los aspectos sociales
y culturales. Diferentes artistas como escritores, pintores, músicos y
cineastas toman la temática minera como factor esencial en sus obras.
La Sierra de Cartagena-La Unión contiene importantes
yacimientos minerales metálicos, principalmente de plomo y zinc, y se
caracterizó por una intensa actividad minera ya en tiempos de cartagineses y
romanos.
Es tan rico el patrimonio industrial y minero que ha quedado
en nuestra sierra, que aún hoy se pueden ver algunos vestigios como
castilletes, chimeneas, lavaderos o polvorines, elementos protegidos y
declarados Bien de Interés Cultural en la categoría de Sitio Histórico.
Son notablemente visibles los paralelismos y semejanzas que
existen entre estas dos cuencas mineras, la unionense y la asturiana. Más de
900 kilómetros separan a estas dos tierras hermanas que comparten historia y
que en esta 57ª edición del festival se unen para recordad y ensalzar su pasado
minero.
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